La desmesura llevó a la Universidad de la Frontera (UFRO) a acumular un déficit de $38 mil millones. Tras el despido de 298 personas informado el 28 de noviembre, se han dado a conocer algunos de los gastos hechos por la universidad que los llevaron a la crisis financiera que enfrentan actualmente.
Por ejemplo, la compra de un hotel en $580 millones, la instalación de un sistema de audio y videoconferencias en las salas de consejo por más de $230 millones, la adquisición de una camioneta Tahoe Chevrolet en casi $62 millones –que de acuerdo con el diputado Miguel Mellado era para el uso de un vicerrector–, la compra de un software de administración –URP Global 3000– que, según los funcionarios de la Facultad de Medicina, ha implicado un gasto que asciende a más de $1.800 millones “sin lograr su efectiva implementación” y salidas al extranjero, calificadas por los mismos funcionarios, como “viajes recreativos”.
La lista suma y sigue. En otra declaración, los funcionarios administrativos de la Facultad de Medicina señalan que en los últimos cinco años hubo un “aumento desmedido de personal de las unidades de casa central. De acuerdo a la información que entrega transparencia UFRO, en agosto del año 2018 entre trabajadores de planta, contrata y honorarios, la Universidad tenía 2 mil 428 contratos, y en abril del año 2024, esa cifra creció a 4 mil 596 en las tres áreas. Un porcentaje de incremento de 47,17%”.
La declaración, emitida en octubre, agrega “que las Unidades Administrativas Centrales, sólo en cuanto al número de cargos de jefatura, han aumentado de 69, según el DU (Decreto Universitario Nº 17) el 2006, a 110 en la nueva estructura aprobada en junio del 2024, lo que representa un 31% de crecimiento. Eso, sin contar la gran cantidad de cargos administrativos y profesionales que dependen jerárquicamente de dichas jefaturas”.
De acuerdo con el Plan de Ajuste Financiero y Presupuestario 2024-2025, presentado por la UFRO este noviembre, también ha habido un aumento en el gasto de remuneraciones, que ha hecho que este ítem represente el 67% del presupuesto aprobado para 2024. Entre los cambios, figura el pago de un treceavo sueldo en 2022 y 2023 pese a que ya había resultados deficitarios en la finanzas universitarias. Y hace un tiempo hubo una polémica por los elevados sueldos recibidos por algunos académicos que, desde la casa de estudios, salieron a aclarar que se trataba de académicos de la “jerarquía más alta” que pueden llegar a percibir una remuneración líquida de $12 millones aproximadamente, y especificaron que dicho monto “considera asignaciones por prestación de servicios que corresponden a recursos de otras fuentes de financiamiento, que no son de los fondos estructurales de la universidad”.
298 despidos en la UFRO… y temen que haya más
“Este es el problema más grande que ha habido de mala gestión en una universidad que tiene un tremendo prestigio. Le han roto el alma al prestigio de una tremenda universidad por mal manejo financiero, por excesivo gasto y no estoy hablando de gasto de personal, porque está pagando la gente de la parte de abajo de la pirámide. No puede ser que no se ajusten el cinturón los decanos, los vicerrectores, los rectores, etc.”, afirma el diputado por La Araucanía Miguel Mellado.
Un grupo de los funcionarios desvinculados presentaron ante la UFRO un recurso para la reposición de sus empleos. En la ocasión, la vocera de los trabajadores, la socióloga Ana Soto, manifestó que dentro de los desvinculados hay al menos 50 personas que percibían el sueldo mínimo.
A principios de noviembre el rector de la UFRO Eduardo Hebel W. –quien se encuentra con licencia médica– adelantó en entrevista con el diario El Austral: “Las desvinculaciones son inevitables (…). Lamentablemente, la situación se desbordó”. En la misma conversación indicó que tenían que ahorrar $5 mil millones al año en personal a contrata y $2 mil millones en personal a honorarios.
“Si el objetivo es ahorrar $5 mil millones anuales, de nada sirve recurrir a los sueldos mínimos y grados más bajos”, retrucó Soto al mismo diario cuando presentaron el recurso para la reposición de sus empleos.
En la misma línea opina el diputado Mellado: “Ajustar los gastos significa terminar con los arriendos innecesarios. Son $38.000 millones, entonces hay que desprenderse de activos que son prescindibles y rebajemos deuda porque al rebajar deuda, rebajas los intereses y el pago de capital (…). No hay viáticos, perfecto, no se sale; se hace el seminario sin catering; se venden todos los vehículos de los decanos, que vayan en su auto o en micro; por tantos años los viajes en avión no se van a poder hacer. Que se ajusten el cinturón sobre todo los que son de arriba; en el tema de sus 13 sueldos, de viáticos, de vehículos especiales. Salgamos de esta sin que pague la gente que gana menos”.
Y es que en atención a lo señalado antes por el rector Hebel, los trabajadores de la UFRO temen que haya más despidos, ahora de las personas a honorarios.
Por otro lado, posterior a las 298 desvinculaciones del 28 de noviembre, los funcionarios de la Facultad de Medicina emitieron una declaración en la que señalan que se les había dicho que las facultades no serían tocadas al momento de los despidos. No obstante, “ llegada la hora, varios de nosotros fueron desvinculados… Frente a eso, vemos con preocupación cómo peligra el pregrado que tanto han dicho que quieren defender”.
Afirman que las 298 personas despedidas no incluyen “a quienes entraron a esta institución de forma arbitraria y con grandes salarios, resultado de la influencia de los vicerrectores”.
La “política del despilfarro”
Trabajadores de la universidad plantean a El Líbero, en condición de anonimato, que “no solo hubo mala gestión, sino un despilfarro descontrolado de platas públicas: la compra del hotel, del auto blindado, servicios de catering millonarios, hablan de una política de despilfarro. No de un error”.
La declaración de los funcionarios de la Facultad de Medicina dice que por años dejaron pasar diversas acciones que fueron el inicio de “malas prácticas”. Dicen que callaron por “miedo a represalias”, pero en vista de las circunstancias actuales decidieron alzar la voz y exigen medidas “más justas” para paliar el déficit como: “Reconocer y rectificar el error que significó la reestructuración de la universidad, que gatilló el aumento en la dotación de personal en la administración central, sin ver hasta hoy los beneficios de esto. Lo que dejó la puerta abierta a la contratación arbitraria de personas ajenas a la institución”; la evaluación de compras erróneas como el software de administración URP Global 3000; y la suspensión y/o congelamiento de los viáticos y salidas al extranjero (llamados cometidos).
Con respecto a esto último, indican que los viajes al extranjero son “recreativos” y ejemplifican –sin mencionar nombres– con que “dos de nuestras autoridades, con funciones totalmente distintas, las que mantenían o mantienen una relación sentimental salen del país con recursos institucionales, por el mismo periodo de tiempo, en las mismas fechas y con el mismo destino. La pregunta es ¿Con qué propósito?, ¿Cuál fue el beneficio institucional de dicho viaje?”.

FUENTE: Declaración Funcionarios Facultad de Medicina// Ruta* intranet ufro, buscadores, buscador cometidos/comisión, año/folio
En cuanto al hotel, Radio Biobío informó el pasado miércoles que en 2020 –en plena pandemia– la UFRO compró un hotel para convertirlo en centro recreacional para los funcionarios; pero según la vocera del grupo de trabajadores despedidos, Ana Soto, fue en 2024 que los funcionarios se enteraron de la existencia de este hotel.
Cuatro decanos piden la renuncia del rector
El plan de ajuste financiero y presupuestario presentado por la universidad el 14 de noviembre de 2024 –y aprobado por la Superintendencia de Educación Superior– reconoce que “desde el punto de vista de la liquidez, entre 2020 e inicios de 2023, la universidad logró mantener una liquidez adecuada, lo que permitió cumplir con las obligaciones financieras”, pero agregan que “desde mediados de 2023 y durante 2024 se ha generado un equilibrio de caja delicado, que ha significado un incremento gradual de cuentas por pagar”.
La situación llevó a que el 29 de noviembre cuatro de los seis decanos solicitaran la renuncia del rector Eduardo Hebel y su equipo de vicerrectores.
“Consideramos que, dadas las circunstancias actuales, así como la magnitud de la crisis, se hace insostenible que el Rector continúe liderando nuestra casa de estudios. Es momento de dar los pasos que permitan renovar confianzas y proyectar una senda de recuperación que priorice el bienestar y la excelencia de nuestra Universidad. Por ello, solicitamos respetuosamente a esta Honorable Junta Directiva que solicite la renuncia al Rector Sr. Eduardo Hebel Weiss y su equipo de vicerrectores, sobre la base de la normativa vigente, lo que permitirá abrir una vía institucional de salida a la grave crisis que nos afecta. Consideramos que esta medida es necesaria para el bien de la comunidad”, dice el texto firmado por los decanos de las facultades de Ciencias Agropecuarias y Medioambiente; Ingeniería y Ciencias; Educación, Ciencias Sociales y Humanidades; y Odontología.
Fuentes vinculadas a la UFRO lamentan que la universidad haya llegado a esta situación de déficit, pues cuando el exrector Sergio Bravo se marchó de la casa de estudios, dejó un superávit.
Eduardo Hebel asumió su primer período como rector de la UFRO en agosto de 2018 para el período 2018-2022. Y fue reelecto para el período 2022-2026. Sin embargo, Renato Hunter Alarcón, vicerrector Académico, está haciendo las veces de rector subrogante. Era él quien estaba al mando cuando se concretaron los despidos. A través de un comunicado manifestó que se trataba de “una decisión difícil y dolorosa, pero que es necesaria dentro de la reducción de costos que responsablemente debemos emprender si queremos retomar nuevamente nuestra solidez financiera”.
Originalmente, Hebel nombró a Hunter como vicerrector de Investigación y Postgrado, cuando asumió en 2018. Además, Hebel también designó a Jorge Petit-Breuilh en la Vicerrectoría de Administración y Finanzas, cargo del que salió en septiembre, cuando iba creciendo la tensión por la situación financiera de la universidad. Actualmente el vicerrector de Administración es Sergio Salgado.
Antes de desempeñarse como vicerrector, Hunter era investigador de la universidad y llegó a dirigir el Nodo de Innovación y Transferencia (I+T) de la UFRO. En 2014 Hunter se hizo parte de la sociedad Applied Consulting Engineering Limitada que entre 2016 y 2018 suscribió seis contratos con la UFRO. No obstante, Hunter se retiró de la sociedad el 10 de abril de 2018.

Medidas internas en la UFRO
Un comunicado de la Comunidad Triestamental (funcionarios, académicos y estudiantes) de la UFRO también cuestiona el manejo de la crisis hecho por las autoridades universitarias: “Hemos sido testigos de la incapacidad de las actuales autoridades para enfrentar esta crisis de manera transparente y responsable. Estamos ciertos que las decisiones y el manejo administrativo del rector y su equipo directivo han contribuido al deterioro financiero y administrativo de la universidad. A pesar de las evidentes irregularidades, hasta la fecha no se han asumido las responsabilidades pertinentes, ni se han implementado cambios estructurales necesarios que evidencien un compromiso real con la recuperación de la universidad”, y hacen un llamado a procesos de auditoria interna y sumarios administrativos, sin perjuicio de una eventual denuncia al Ministerio Público.
En tanto, los estudiantes de la UFRO se mantienen en paro.
Hunter envió un aviso a la comunidad universitaria en el que comunican los “avances en las gestiones para esclarecer las condiciones que llevaron a esta situación”. Allí se señala que la contraloría universitaria realiza una auditoría financiera a los fondos institucionales “para verificar el correcto uso y destino de los recursos financieros” entre los años 2022 hasta septiembre de 2024 –mes en el que Petit-Breuilh dejó la Vicerrectoría–. Sobre esto ya existen informes preliminares que fueron enviados al fiscal encargado del proceso investigativo interno.
Por otro lado, el comunicado indica que se solicitó a la Dirección Jurídica de la universidad que determine las acciones legales a seguir a partir de los hallazgos de las auditorías.
Cataldo descarta cierre de la UFRO
La Superintendencia de Educación Superior también se ha pronunciado sobre este asunto. Dicen a El Líbero que “se realizará un seguimiento riguroso de la implementación del plan financiero de la universidad, verificando que las medidas adoptadas se ejecuten de acuerdo con lo planificado, logren los resultados comprometidos y contribuyan efectivamente a la estabilidad de la institución. En caso de que ello no ocurra, la Superintendencia ejercerá todas las facultades que le confiere el marco normativo, lo que podría conllevar la aplicación de sanciones a la Universidad”.
Añaden que velarán por el respeto de las normativas vigentes, incluyendo las relacionadas con los derechos laborales y el bienestar de toda su comunidad institucional.
El 2 de diciembre, durante una actividad por el inicio de la rendición de la Prueba de Acceso a la Educación Superior (PAES), el ministro de Educación, Nicolás Cataldo, afirmó que “no hay ninguna posibilidad que la Universidad de la Frontera cierre”. Apuntó que “lo que debe ocurrir, y está en proceso de que ocurra, es todo un proceso de ajustes. De hecho, ya medidas se han estado tomando, como por ejemplo reducción de personal, entre otros elementos de ajustes financieros”.
Fuente: ellibero.cl