Visiones en el lecho de muerte son verificables, constata un físico

Visiones en el lecho de muerte son verificables, constata un físico

El Intrigante Caso del Físico William Barrett

Un destacado físico de principios del siglo XX, Sir William Barrett, profesor del Royal College of Science en Dublín y pionero en óptica e ingeniería eléctrica, documentó un fascinante caso que desafía las explicaciones convencionales sobre las experiencias cercanas a la muerte y las visiones en el lecho de muerte.

Barrett, reconocido por sus investigaciones en aleaciones metálicas y el desarrollo de los «Stalloids» (aleaciones de silicio-hierro fundamentales para la telefonía temprana), se interesó en estos fenómenos a través de su esposa médica, quien registraba sistemáticamente las visiones reportadas por pacientes moribundas durante el parto.

Un caso particularmente notable ocurrió en 1924, cuando una joven mujer en su lecho de muerte tuvo una visión extraordinaria. Mientras su esposo se inclinaba para hablarle, ella lo apartó suavemente diciendo: «Es tan hermoso«, y luego añadió: «Oh, y ahí está Vida«, refiriéndose a su hermana fallecida tres semanas antes. Lo sorprendente del caso es que la paciente no había sido informada del fallecimiento de su hermana, pues la familia había decidido ocultarle la noticia para evitarle más angustia en su delicado estado.

El Dr. Sean McDowell, en una reciente entrevista con el filósofo J. Steve Miller de la Universidad Estatal de Kennesaw, señaló que este no es un caso aislado. Existen múltiples registros documentados de personas que, en momentos cercanos a la muerte, ven a familiares fallecidos cuya muerte desconocían, incluyendo casos de niños adoptados que ven a sus padres biológicos sin saber de su existencia.

El psiquiatra Bruce Greyson, de la Universidad de Virginia, ha documentado casos similares en la actualidad. Uno de los más impactantes es el de Eddie, un niño de nueve años que, tras recuperarse de una fiebre alta, describió haber estado en el cielo donde vio a su abuelo, una tía, un tío y, sorprendentemente, a su hermana Teresa de 19 años. Lo extraordinario fue que Teresa había fallecido en un accidente automovilístico el día anterior, información que ni siquiera los padres conocían en ese momento.

La psicóloga clínica Marilyn Mendoza, en Psychology Today, ha identificado tres teorías principales para explicar estas experiencias: la explicación fisiológica (cambios químicos en el cerebro moribundo), la psicológica (mecanismo de defensa ante la muerte) y la espiritual (evidencia de un alma y una vida después de la muerte). Sin embargo, casos como el documentado por Barrett, donde existe información verificable que el paciente no podría haber conocido por medios convencionales, parecen desafiar las explicaciones puramente materialistas.

Es notable ver cómo en la actualidad, con los avances en medicina de emergencia, muchos pacientes que anteriormente habrían fallecido ahora sobreviven y pueden relatar sus experiencias cercanas a la muerte. Esto ha permitido un estudio más sistemático del fenómeno, aunque las explicaciones científicas tradicionales continúan siendo insuficientes para dar cuenta de casos como el documentado por Barrett.

La frecuencia y consistencia de estos reportes, junto con la verificabilidad de la información que quienes han experimentado el fenómeno no podrían haber conocido por medios normales, plantea interrogantes fundamentales sobre la naturaleza de la consciencia y la posibilidad de su persistencia más allá de la muerte cerebral clínica.

Fuente: razonmasfe.com