Ante la meseta de casos de coronavirus, el sector turístico de la región de Magallanes decidió rescindir de la restricción que imposibilitaba a entrar a comercios a los turistas no tenían la convalidación de vacunas.
Gremios del Turismo de la región chilena de Magallanes mantuvieron una reunión en la que determinaron que a partir del 1 de septiembre se dejará de exigir el pase de movilidad a turistas y vecinos a la hora de ingresar a los locales comerciales.
La medida se tomó en baje a la problemática que enfrentan a diario los servicios turísticos y gastronómicos al tener que solicitar el pase para ingresar a sus locales, lo que a la vez generaba un malestar para aquellas personas que visitan las localidades de Punta Arenas y Puerto Natales.
«El pase de movilidad se ha transformado en un gran problema para nosotros, sobre todo para el rubro gastronómico. Los turistas y la comunidad en general que visita nuestros locales muchas veces se resisten a presentarlo al ingreso y nosotros no tenemos la autoridad para exigirlo. No tenemos el poder de fiscalización», explicó Jaime Jelincic, presidente de Gastro PUQ.
Asimismo enmarcaron esta nueva medida en base a la mejora en la situación sanitaria que atraviesa el país chileno respecto al coronavirus: «La pandemia en Chile ha ido evolucionando y todas las actividades económicas han logrado avanzar hacia su recuperación menos el turismo, que no ha podido reactivarse debido a las diversas restricciones de movilidad», señaló Jelincic.
«Si bien la eliminación de la homologación de vacunas ha sido un paso importante para retomar la confianza del turismo receptivo, la exigencia del pase por parte de restaurantes y hoteles se ha ido transformando cada vez más en un tema de conflicto con los visitantes con menor disposición a este tipo de medidas. Creemos que es necesario dar mayores pasos para retomar la normalidad del funcionamiento del turismo, como estamos viendo que están haciendo gradualmente todos los países del mundo», dijo por su parte Cristóbal Benítez, gerente de HYST.
En tanto, la gerente de la Cámara de Turismo de Última Esperanza A.G, Adriana Aguilar, apoyó la iniciativa :»Consideramos que se deben igualar las condiciones con el resto de los países del mundo, en especial, porque pertenecemos a un destino turístico eminentemente internacional. Es relevante avanzar hacia la normalización de los servicios y dejar de lado las limitaciones y restricciones que afectan al sector turismo, necesitamos señales sólidas de reactivación».
Fuente: laopinionaustral.com