Los camiones autónomos están cambiando rápidamente la industria de los Estados Unidos. Ahora una nueva línea muestra un ahorro del 46% de tiempo sobre los camioneros humanos.
El camión sobre estas líneas parece un trailer del montón pero en realidad es una máquina que está cambiando la industria del transporte de mercancias de forma radical: un vehículo completamente autónomo capaz de conducir sin parar, reduciendo viajes de 24 horas a sólo 14, incrementando la seguridad en carretera y ahorrando combustible en comparación con un camionero humano. Es el primer acto de la revolución del transporte autónomo, que hará que conducir sea innecesario en muy pocos años.
Pertenece a la flota de TuSimple, una compañía dedicada a convertir camiones normales en vehículos que pueden operar sin conductor gracias a un sistema de inteligencia artificial propietario conectado a sensores de todo tipo.
Su último proyecto — anunciado ayer sin bombo ni platillo — es un sistema logístico que tildan de “revolucionario” para la industria del transporte alimentario. Lo han puesto en marcha con una red internacional de agricultores y distribuidores llamada The Giumarra Companies y la mayor asociación de mayoristas de alimentación de los Estados Unidos.
Según TuSimple, el proyecto comenzó el 3 de mayo con un camión que recogió varias toneladas de sandías en la ciudad de Nogales, Arizona, para transportarlo durante 1.500 kilómetros hasta Oklahoma City, Oklahoma, en sólo 14 horas y seis minutos. Para comparar, afirma TuSimple, un camionero humano cubre la misma ruta en 24 horas y seis minutos.
Cómo funciona
No es que el camión de TuSimple vaya más rápido que un humano. Más bien al contrario, porque respeta en todo momento los límites de velocidad. El cambio está en que un camión autónomo no tiene que parar para ir al baño, comer o descansar. Puede conducir ininterrumpidamente desde su origen al destino, aunque un humano tiene que hacer la primera y la última milla según la ley norteamericana.
Para poder realizar este trabajo, los camiones de TuSimple utilizan varias tecnologías. Para empezar, el sistema de inteligencia artificial capaz de analizar en tiempo real las condiciones de la carretera y los vehículos de su entorno de forma continua, tomando decisiones de conducción constantemente según un modelo de aprendizaje constante que realiza millones de simulaciones.
El camión es capaz de ver 360 grados a su alrededor usando tres conjuntos de sensores. El primero son una serie de cámaras de alta definición que pueden ver a un kilómetro de distancia. Luego, un sistema de radar ofrece detección de obstáculos en una circunferencia de 300 metros de radio. Por último, tiene un sistema LiDAR, una cámara que utiliza rayos láser para crear un mapa tridimensional en un radio de 200 metros en torno al camión.
Finalmente, esta información en tiempo real combina con detallados mapas de carretera y un sistema GPS.
El resultado es un conductor artificial que puede ver en cualquier condición atmosférica, de día y de noche, con una precisión y alcance mucho mayor al humano. TuSimple afirma que su sistema garantiza un margen de seguridad de 30 segundos a velocidad de 80 kilómetros por hora. Es decir: puede detectar un posible problema y tener un margen de 30 segundos para reaccionar. La seguridad, afirman, es mayor que la de un conductor.
A esto hay que añadirle el hecho de que nunca se cansa, que su nivel de alerta no baja en ningún momento y que optimiza la conducción para obtener mayor rendimiento del combustible. TuSimple afirma que el mismo camión con un conductor artificial usa un 21% menos de combustible a 50 km/h; un 17% menos entre 50 y 65 km/h; y un 8% menos de 65 a 80 km/h.
La revolución de los vehículos autónomos será radical
Según el presidente de Giumarra Companies, Tim Riley, “la tecnología de camiones autónomos cambia el juego para nosotros porque su eficiencia de tiempo y coste nos da la oportunidad de ofrecer frutas y verduras más frescas por todo Estados Unidos, especialmente en zonas sin agricultura y comunidades rurales”. No es el único que lo dice. Elon Musk quiere vender camiones Tesla con tecnología similar pero con motores eléctricos, que tendrán un coste operativo aún menor que los diesel.
El transporte de mercancías es ya una de las primeras industrias que van a sufrir una transformación radical gracias a los camiones autónomos. Según algunas predicciones de analistas, la mayoría de conductores de camiones de largo recorrido podrían verse reemplazados por conductores artificiales para 2027.
El resto, incluyendo los taxistas y conductores de Uber, no tardarán mucho más en verse en el paro. De hecho, los días de conducción están contados para todos nosotros. Una vez la tecnología haya madurado lo suficiente, el cambio a coches totalmente autónomos será muy rápido, ayudado por el cambio a los coches eléctricos. En un par de décadas, dicen los expertos, la idea de conducir nuestro propio coche nos parecerá anticuado, algo del siglo pasado.
El cambio será tan profundo que promete cambiar totalmente la manera en que la industria de la automoción venda coches. La predicción generalizada es que, en un futuro no muy lejano, nadie tendrá coche propio excepto como objeto de colección o para divertirse. Y cuando digo no muy lejano, la estimación es que muchos de nosotros lo veremos.
Los coches privados serán sustituidos por flotas de coches autónomos de diferentes marcas que podremos coger como ahora nos metemos en un coche eléctrico compartido más cercano o pillamos un taxi o un Uber. Excepto que el coste será mucho menor y no estaremos limitados a viajar por zonas urbanas, gracias a los avances en el alcance de los vehículos eléctricos.
Fuente: elconfidencial.com