El dólar y el euro se dispararon esta jornada, en el denominado “lunes negro” para la economía a nivel global.
La divisa norteamericana cerró en $842, superando su máxima histórica del 28 de noviembre de 2019 ($828), según datos de la Bolsa Electrónica de Chile.
El euro tampoco se quedó atrás y llegó a $965.
La devaluación del peso chileno está marcada por las incertidumbres locales por las movilizaciones sociales, más un escenario internacional amenazado por el coronavirus y la caída los precios del petróleo -la más fuerte desde la Guerra del Golfo en 1991- que desplomó a los mercados a nivel global.
En línea con lo anterior, la Bolsa de Santiago tampoco tuvo una buena jornada.
En detalle, la plaza bursátil local estaba con una caída cercana al 4%: el índice selectivo IPSA cedió 3,29% hasta los 4.090 puntos. Desde 2016 que no caía de los 4.100 puntos.
Las principales bajas las anotaron Schwager Mining&Energy (-25%) y SQM-A (-7,81%), por nombrar algunas.
En tanto, el precio del cobre también se vio afectado, cerrando en la Bolsa de Metales de Londres en un bajo nivel: US$2,487 la libra.
Gobierno llama a la calma
El Gobierno, en voz del ministro de Hacienda Ignacio Briones, comentó el “lunes negro” que está viviendo la economía a nivel global, golpeando a Chile con un alto precio del dólar; más la caída del precio del cobre y de las acciones en la Bolsa de Santiago.
Briones llamó a la calma, argumentando que el país está “bien preparado institucionalmente”, ya que posee “una regulación financiera robusta, con mecanismos de coordinación que son institucionales como el Consejo de Estabilidad Financiera (…)”.
Lo anterior, añadió, ayudaría a hacer frente al escenario económico mundial.
Ante la caída de las bolsas a nivel mundial, analistas de Moody’s advirtieron “un riesgo de recesión mundial, un retroceso prolongado del consumo, además del cierre prolongado de las empresas que conduciría a suprimir empleos”.
En esa vereda, el ministro de Hacienda remarcó los mecanismos que ha impulsado el Ejecutivo para apoyar al sector Pyme. Seguidamente, sostuvo que “tenemos una política fiscal expansiva con un gasto público que va a crecer más de un 8,5%, que permite contrarrestar los eventuales efectos adversos (…)”.
Por último, nuevamente el Gobierno no descartó reevaluar las proyecciones de crecimiento. Eso sí, Briones fue cauteloso y enfático en señalar que ello se analizará en conformidad a la contingencia.