Las condiciones habrían cambiado completamente para el expárroco de El Bosque.
Fernando Karadima fue expulsado de la Iglesia Católica por el Papa Francisco debido a los casos de abusos sexuales que llevó a cabo en completa impunidad y por muchos años.
El exsacerdote permanece desde el año pasado en el Hogar de Ancianos San José, de las Religiosas de la Congregación de Santa Teresa Jornet, en Lo Barnechea, pero ahora que fue dimitido del clero, las condiciones cambiaron para Karadima.
Esto, porque al perder su condición la iglesia ya no es la responsable de lo que pueda suceder con el expárroco de El Bosque.
«Él no vive en un convento, sino en una casa de ancianos, y ahora tendrá que ver el mismo Fernando Karadima donde podrá vivir y dónde lo podrán recibir«, señaló el obispo Fernando Ramos a CNN Chile.
«Al perder el estado clerical, evidentemente pierde la condición que se le fijó residencia de parte del obispo, y al perder la condición de clérigo, él mismo debe buscar donde vivir», agregó respecto a la situación actual del sacerdote.
Otros de los aspectos que se tienen que resolver tras su expulsión, tienen que ver con el dinero para sus gastos externos, donde Ramos indicó que «él tiene derecho a recibir una pensión muy mínima de la mutual que son recursos acumulados durante los años de ministerio sacerdotal que son propiedad de él», dijo.
De esa forma, el obispo agregó que la medida tomada por el Papa fue una decisión que le parecía necesaria. «Quizás se podría haber tomado antes, pero en esto la Santa Sede ha ido evolucionando para afinar mejor las decisiones en este tipo de materias y en este simple sentido cuando ha habido este tipo de delitos evidentemente son incompatibles con el ejercicio del ministerio sacerdotal», concluyó.