“Una comedia de errores”. Así definen algunos en el oficialismo lo que ha ocurrido con la presentación de la acusación constitucional contra la ministra Ángela Vivanco, proceso de destitución que tuvo su primer hito ayer miércoles con la constitución de la comisión revisora.
Hasta la instancia, concurrieron los diputados socialistas Tomás de Rementería y Nelson Venegas, quienes llegaron con un documento que buscaba, de alguna forma, enmendar un error en la presentación de libelo que cita de forma errada la causal que se invocó para acusar a la ministra de la Corte Suprema.
Fue el mismo De Rementería —firmante de la acusación— quien salió a admitir el error en la redacción del escrito. “Hubo un error de transcripción como ha ocurrido en otras acusaciones constitucionalesque se han rechazado por motivos de fondo. Acá lo que se tiene que analizar es el motivo de fondo, que está claro el que se invoca y las conductas reñidas con el buen desempeño que tiene que tener una ministra de la Corte Suprema”, sostuvo el parlamentario.
No obstante, pese al intento de bajarle el perfil a la situación, en la alianza de gobierno se levantaron recriminaciones internas. En particular, porque el error “abre una ventana” para que la oposición eventualmente se descuelgue de dicha acusación y, en cambio, busque aprobar la propia contra Vivanco.
¿El problema? La acusación de la oposición incluye a Vivanco y Sergio Muñoz en el mismo texto acusatorio, por lo que aprobarlo significa dejar caer a los dos ministros, escenario al que no todos están dispuestos en el oficialismo ya que se cree que los argumentos para remover a Muñoz no son suficientemente sólidos.
Por lo mismo, el error en la redacción del texto —que estuvo a cargo de los juristas del PS y del FA— ha molestado a algunos en el sector. Sin embargo, como lo hizo De Rementería, la estrategia será apelar al fondo del libelo.
Factor Chadwick en la acusación
El otro factor que encendió el debate es la mención que se hace sobre el exministro Andrés Chadwick en el texto firmado por un grupo de diez diputados del oficialismo.
“El instigador y motor del tráfico de influencias para la comisión de delitos e irregularidades siempre es el señor Andrés Chadwick, que si bien no puede ser objeto de esta acusación constitucional por carecer hoy día de la investidura que lo permita, a lo menos merece un severo reproche moral por parte de la sociedad y del conjunto del sistema político”, asevera el texto.
La mención no pasó desapercibida motivando una dura respuesta de la UDI, partido en que milita Chadwick. “Lo que les interesa a los que escribieron esa acusación, más que destituir a la ministra Vivanco, es de pasada manchar a Andrés Chadwick”, dijo el timonel gremialista, Guillermo Ramírez.
Además, el exministro anunció una querella a raíz del contenido del texto, lo que decantó incluso en que renunciara a su cargo como presidente de la junta directiva de la Universidad San Sebastián, cargo en que ha sido cuestionado por la gran cantidad de figuras del piñerismo que realizan clases y el abultado sueldo que recibía Marcela Cubillos.
“Con la misma convicción asumí la presidencia de la Junta Directiva en junio de este año y a la que he presentado en el día de hoy mi renuncia. He debido tomar esta decisión dolorosa para concentrar mi tiempo y energías en hacer frente a las infamantes acusaciones de las que he sido objeto”, indicó Chadwick a través de un comunicado.
Fuente: eldesconcierto.cl