Según recoge el diario británico, se han encontrado informaciones en las que sería cada vez más posible ‘golpe de estado’ contra el presidente ruso.
Una fuente anónima habría filtrado al periódico The Times que el riesgo de ‘golpe de estado’ del Servicio Federal de Seguridad (FSB) contra el presidente Putin crece cada semana que continúa la guerra en Ucrania, según esta fuente de la inteligencia rusa.
La fuente anónima habría enviado una docena de cartas a Vladimir Osechkin, una de las personas más buscadas de Rusia por su trabajo denunciando los abusos en las cárceles, que “el caos y el descontento” se habrían apoderado de los servicios de seguridad tras la invasión de Ucrania.
Primeras voces en contra de Putin
Según la portavoz del Ministerio de Exteriores de Rusia, Maria Zajarova, las negociaciones con Ucrania continuarán realizándose «vía telemática», y ambos países habrían comenzado a pensar seriamente la idea de redactar un borrador de acuerdo sobre la situación actual, «su neutralidad y las garantías de seguridad», y que también se están abordando aspectos «militares, políticos y humanitarios».
Agentes de inteligencia habrían comentado con diferentes sectores del Gobierno que Putin no sería la mejor opción a la actual situación no sólo de la guerra, sino de cómo deja en precario al país si las sanciones internacionales siguen aumentando.
Analistas internacionales afirman que el hecho de que se haya hecho público es sinónimo de que algo se está moviendo, especialmente dentro de los servicios de inteligencia del Kremlin. No es ya la población que se manifiesta, y acaba en la cárcel, sino que ‘dentro’ podría estar viéndose la deriva de la guerra como inapropiada y la única manera de cambiar la situación sería con un cambio en el gobierno.
Girkin, excomandante de Putin, pesimista
Uno de los comandantes claves de Putin durante la invasión de Crimea, Igor Girkin, se mostró pesimista sobre la evolución de la guerra para Rusia. «No ha habido logro estratégico en ninguna de las direcciones, solo logros operativos. Sintiéndolo mucho, soy pesimista. Creo que nos vamos a involucrar en un conflicto sangriento a largo plazo, agotador y extremadamente peligroso para la Federación Rusa», ha indicado.
Fuente: as.com