El colapso de los centros de vacunación obligó al gobierno a posponer el uso del documento, que será un requisito para realizar trámites en la banca, en oficinas públicas y privadas y para viajes terrestres y aéreos.
La obligatoriedad en Bolivia de portar un carné de vacuna contra el COVID-19 a partir del comienzo de este año disparó la demanda de inmunizantes y colapsó los centros de salud, por lo que el gobierno decidió suspender temporalmente el uso del documento desde este jueves (06.01.2022).
Centros de salud en todo el país mostraban, desde que entró en vigencia la solicitud de la cédula de vacunación el 1 de enero hasta el miércoles, una enorme aglomeración de personas.
La alcaldía de La Paz dijo este jueves en un comunicado que «aumentó en 10 veces la solicitud de vacunación en tres hospitales municipales en una semana».
«Vino una avalancha de gente que colapsó el sistema de vacunación», dijo el secretario municipal de Salud de la ciudad de Cochabamba (centro), Aníbal Cruz.
Explicó que desde principios de mes se inmunizaban en la ciudad de Cochabamba, la cuarta más poblada del país, a 10.000 personas por día, lo que prometía alentadoras metas.
Capacidad de atención desbordada
Empero, la presión ciudadana por vacunas desbordó la capacidad de atención de los centros de salud y esto obligó al poder Ejecutivo a suspender la solicitud del documento de vacunación desde este jueves hasta el próximo 26 de enero.
El Ministerio de Salud, en un comunicado, explicó que la medida permitirá «mejorar los puntos de vacunación y adecuarlos con mejores medidas de bioseguridad para evitar aglomeraciones».
Este mismo jueves los puntos de vacunación mostraron un descenso de personas.
El alcalde de La Paz, el opositor Iván Arias, criticó al poder Ejecutivo. «Se debería masificar la vacunación en vez de retroceder en la exigencia del carnet anticovid», dijo.
Cruz, el secretario de Salud de Cochabamba, también lamentó la medida de suspender la exigencia del documento de inmunización, que era un requisito para realizar trámites en la banca, en oficinas públicas y privadas y para viajes terrestres y aéreos.
Bolivia, de casi 12 millones de habitantes, vacunó con dos dosis a más de 3,7 millones de personas y con una inyección única a más de 992.000 personas. Hasta la fecha el país suma 641.817 contagios y 19.848 fallecidos por covid y transita por el pico de una cuarta ola.
Fuente: dw.com