Un hombre armado mató al menos a 16 personas, incluida una agente de la policía, durante un tiroteo durante el fin de semana en una pequeña localidad de Nueva Escocia, dijo la Real Policía Montada de Canadá.
La cifra de muertos actualizada no incluye al presunto atacante.
“Nuestro importante trabajo de investigación continúa. Por respeto a las familias que aún no han sido notificadas, no podemos proporcionar ninguna información adicional en este momento”, dijo la portavoz de la Sede Nacional de la Policía Montada, Catherine Fortin, en un comunicado a CNN.Los agentes de policía se preparaban para detener a un sospechoso en Enfield, Nueva Escocia, el domingo.
En una conferencia de prensa el domingo por la noche, la policía describió el caos registrado tras múltiples llamadas al 911 el sábado por la noche en una propiedad en Portapique, Nueva Escocia.
“Cuando la policía llegó al lugar, los agentes localizaron varias víctimas dentro y fuera de la casa”, dijo a periodistas Chris Leather, superintendente jefe de la RCMP.
La policía dijo que no están seguros de cuántas personas murieron o resultaron heridas.
La agente fallecida fue identificado como Heidi Stevenson, madre de dos hijos y veterana con 23 años en la Policía Montada. Otro agente está en el hospital recibiendo tratamiento por lesiones no mortales que sufrió en el incidente, dijo la Policía Montada en Facebook.
Leather dijo que la búsqueda del sospechoso duró toda la noche y los llevó a varias escenas del crimen a kilómetros de distancia. El sospechoso finalmente fue visto el domingo por la mañana en una parada de camiones.
“La búsqueda del sospechoso terminó esta mañana cuando el sospechoso fue localizado y puedo confirmar que ha fallecido”, dijo Leather.
La policía de Nueva Escocia identificó al presunto pistolero como Gabriel Wortman, de 51 años. El hombre eludió a la policía durante varias horas durante la noche del domingo, después de que se informaron incendios en muchos lugares de la zona.El presunto tirador fue identificado como Gabriel Wortman, de 51 años.
La cacería fue complicada por el hecho de que se cree que el sospechoso llevaba como mínimo parte de lo que parecía ser un uniforme de la policía, y puede haber estado conduciendo un vehículo adecuado para lucir como un automóvil de policía, dijo Leather.
“Por supuesto, ese es un elemento importante en la investigación, el hecho de que este individuo tuviera un uniforme y un auto de policía a su disposición ciertamente habla de que no es un acto al azar”, dijo Leather.
Pero Leather dijo que era demasiado temprano en la investigación para decir cuál era la motivación del atacante y que algunas víctimas “parecían no tener una relación con este”.
Un agente de la policía le dijo a CNN anteriormente que las autoridades estaban registrando media docena de escenas del crimen, comenzando en Portapique y hasta Enfield, donde el sospechoso fue detenido.
La Real Policía Montada de Canadá había advertido al público en Twitter que Wortman podría haber estado usando un uniforme policial y conduciendo un Chevrolet Tracker plateado que lucía como un vehículo policial. Pero aclararon que no era empleado de la policía.
Mientras perseguían al atacante, la policía les dijo a los residentes que se quedaran en casa y cerraran sus puertas, advirtiendo que se le consideraba “armado y peligroso”.
El camionero de Ontario, Tom Nurani, dijo a CTV News, afiliada de CNN, que estaba en la parada de camiones en Enfield, donde el sospechoso fue arrestado cuando escuchó gritar a un miembro del personal.
“Ella dijo: ‘¡Dios mío, cierren las puertas, él está aquí! Y me asomé por la ventana y vi algunos vehículos de la policía y había cuatro o cinco uniformados con armas de fuego”, dijo Nurani.
El testigo Glen Hines iba conduciendo cuando escuchó disparos, le dijo a CTV. “Todo lo que podía escuchar eran disparos y a mi esposa, pensé en llamar al 911, porque ella estaba entrando en pánico, la asustó mucho”, dijo Hines.
Stephen McNeil, primer ministro de Nueva Escocia, calificó el tiroteo como “uno de los actos de violencia más insensatos en la historia de nuestra provincia”.
En una conferencia de prensa sobre covid-19, dijo a los periodistas: “Nunca imaginé cuando me acosté anoche que me despertaría con la horrible noticia de que un tirador activo andaba suelto en Nueva Escocia”.
El primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, tuiteó: “Nuestros corazones están con todos los afectados por el tiroteo”, y agregó: “Los tenemos a todos en nuestros pensamientos”.
El presidente del Sindicato de la Policía Nacional, Brian Sauvé, dijo que los corazones de los agentes “están llenos de dolor y tristeza hoy porque hemos perdido uno de los nuestros”. Elogió a los oficiales que ayudaron a poner fin al ataque.
“Un segundo agente resultó herido en el cumplimiento de su deber. Haremos todo lo posible para apoyarlos y les deseamos una recuperación completa”.
En un comunicado, el Ministro de Seguridad Pública de Canadá, Bill Blair, dijo que fue un “día verdaderamente desgarrador para todo el país”.
“Tragedias como hoy son horribles y nunca deberían suceder. Quiero compartir mis más profundas condolencias con todos los que sufren en este momento, particularmente las familias y amigos de las muchas personas inocentes que fueron asesinadas”, dijo Blair. “Mientras que las familias lloran y buscan respuestas, nuestros corazones se quiebran junto con los de ellos. Nos afligimos con ellos”.
Fuente: cnnespanol.cnn.com