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Durante su intervención en la 73 Asamblea General de las Naciones Unidas, el presidente de Chile, Sebastián Piñera, solicitó “el sustento” del bloque político para brindar ayuda a los migrantes, sobretodo venezolanos, que huyen de la crisis de sus países.
En su discurso, el Primer Mandatario se refirió específicamente a la crisis que atraviesa Venezuela, país que aseguró está gobernado por un “régimen que no respeta la libertad ni los derechos humanos”, situación que a su juicio deriva en uno de los mayores éxodos de la región.
“Venezuela está viviendo una tragedia porque sus habitantes están huyendo de condiciones ínfimas y precarias de existencia”, expresó.
Piñera recalcó que en la nación caribeña existe una “crisis moral, política y económica” que está siendo acallada por el Gobierno de Nicolás Maduro.
“Estamos como la voz del pueblo venezolano que el régimen de Maduro ha enmudecido”, sentenció.
El mandatario chilenos condenó que “muchos venezolanos estén, literalmente, muriendo” por la falta de medicamentos e insumos médicos, que se agrava ante la negativa del Ejecutivo venezolano de “abrir las puertas a la ayuda humanitaria” que están dispuestos a entregar mandatario de la región.
“¡¿Cómo puede ser un presidente tan ambicioso, tan insensible que esté dispuesto a causar ese grado dolor a su pueblo con tal de retener o aferrarse al poder?!”, cuestionó.
Asimismo, reiteró cual es la posición de Chile respecto al gobierno venezolano y asegura que seguirá sin reconocer la legitimidad del mismo, porque “no reconocen la legitimidad de las últimas elecciones de Venezuela”. A su juicio, las recientes elecciones presidenciales en las que Maduro resultó ganador, no cumplieron con el mínimo de estándares internacionales requeridos para establecer su validez.
“Chile no reconoció la legitimidad de las elecciones en Venezuela y no reconocerá la legitimidad del nuevo gobierno que surge de esas elecciones”, aseveró.
Piñera también repudió los asesinatos en el marco de la represión de las manifestaciones antigubernamentales en Nicaragua y cuestionó la libertad de derechos en Cuba.
Aseveró que su nación “hará todo lo que esté en su alcance para recuperar su libertad, democracia y el respeto a los DD.HH. en esos países”, pero precisó que para ello se requiere del sustento de las Naciones Unidas.
El mandatario de la nación austral recordó que su gobierno ha implementado una serie de cambios en la políticas migratorias para garantizar el mayor cobijo a quienes llegan en la búsqueda de calidad de vida, de una forma “segura, ordenada y regular”; siempre y cuando los nuevos ciudadanos se adapten a las leyes nacionales y lleguen a trabajar por el crecimiento del país.
Instó al Consejo de la ONU a avocarse y modernizarse para tratar las crisis que afrontan estos países de una forma más rápida y eficiente.
